Melbourne, enero 28, 2024
El italiano Jannik Sinner (22 años, # ATP) escribió su nombre en la historia grande del tenis al coronarse en el Australian Open, el primer Grand Slam de su carrera, luego de vencer al ruso Daniil Medvedev en una épica remontada por 3-6 3-6 6-4 6-4 6-3, luego de tres horas y 44 minutos.
La definición del nuevo rey de Melbourne comenzó con un Medvedev agresivo, siendo una pared devolviendo todos los golpes, y atacando todo el tiempo la bola para dejar a Sinner sin tiempo para pensar y tomar el control del punto.
De esa manera, a toda máquina, el ruso consiguió ponerse en ventaja con un doble 6-3. La final, que en la previa se había presentado como un choque de dos tenistas en su mejor momento, parecía que iba a terminar en sets corridos. Sin embargo, el italiano, de a poco, encontró su juego y dio muestras de recuperacón al final del segúndo parcial.
Y así mientras se desarrollaba el noveno juego de la tercera manga, con Daniil en el saque, Jannik quebró para el 6-4. En el cuarto parcial se comenzó a notar el cansancio de Medvedev, quien cargaba en sus hombros tres compromisos a cinco sets, especialmente el de la semifinal ante Alexander Zverev a quien le dio vuelta el match.
La situación se repitió: en el noveno game del cuarto set, el italiano tomó el servicio de su rival y el partido se iba a un quinto parcial,
A esas alturas ya se notaba al ruso con menos resto físico y evitaba los extensos y terroríficos rallies que intercambiaban. Hasta que Sinner quebró en el quinto juego y cerró con una derecha paralela imposible para Medvedev.
Sinner, primer campeón italiano del Abierto de Australia, comentó sobre la presión que tenía por ganar un ‘Major’. “Sí, siempre hay presión, pero la presión es algo bueno. Hay que tomárselo de buena manera, es un privilegio, ¿no? Porque no hay tantos jugadores que tengan este tipo de presión, pero por otro lado, cuando tienes presión, siempre hay que pensar que la gente cree que realmente puedes hacerlo. Entonces sí, me gusta bailar en esa tormenta de presión”.
Y luego aterrizó lo realizado en el torneo, consciente de que lo logrado es algo histórico, pero que debe seguir mejorando: “Ahora tengo que procesar lo que he hecho, es un gran momento para mí y para mi equipo, pero por otro lado, también sabemos que tenemos que mejorar si queremos tener otra oportunidad de volver a levantar un gran trofeo. Así que esto es todo, el proceso y el trabajo duro de vez en cuando da sus frutos».
A su vez Medvedev analizó lo sucedido. “Creo que lo que pasó es que él empezó a jugar mejor, un poco diferente tácticamente, porque le propuse algo diferente al comienzo del partido, que fue muy agresivo. Me cansé un poco físicamente, pero como en todos los partidos anteriores, donde mis rivales también se cansaron, pero Jannik no lo hizo”, indicó el ruso que perdió su tercera final en Australia y la segunda teniendo una ventaja de dos sets arriba. “En velocidad promedio de bola creo que está entre los tres o cinco primeros en el circuito. Golpea muy fuerte, antes le faltaba un poquito porque es difícil pegar fuerte. Puedes fallar. Ahora no falla casi y por eso tiene un Grand Slam, muchos títulos y está ganando muchos partidos”, finalizó el ex número 1 del mundo.
FOTO: Jannik Sinner y Daniil Medvedev
Crédito: @AustralianOpen